Carnevale aludió en primer lugar a la pandemia y al modo en que desnudó dos aspectos que afectan al mundo: el cambio climático y la enorme desigualdad que golpea especialmente el campo de la mujer y del género.
Demostró con datos que siguen empeorando, sobre todo en América Latina y el Caribe, “que las mujeres representan el 70% del decil más pobre de la población” y que en la división sexual del trabajo ocupan entre un 80 y un 90% de la denominada esfera reproductiva, mientras que la productiva continúa reservada a los varones. De acuerdo con encuestas nacionales del uso del tiempo, un 80% del trabajo no remunerado en nuestro país es ocupado por mujeres.
Consideró esta evidencia como una manifestación de violencia tanto como la segregación vertical de alcanzar con dificultad los cargos jerárquicos o aquellas que directamente no acceden al empleo o lo hacen en condiciones “flexibles” por tener que conciliarlo con tareas de cuidado. “Esto explica la brecha de ingresos. Hoy en Argentina las mujeres tienen ingresos que están, en promedio, un 25% por abajo del de los varones.”
Asimismo, sostuvo la concejala que “en cuanto a la participación en el empleo de personas trans, travestis y personas diversas, no existe todavía información oficial suficiente dado que allí la invisibilización es prácticamente absoluta”. También hizo referencia al ámbito de la economía popular que se traduce en muchos casos en trabajos de subsistencia, donde más de dos millones y medio de personas se encuentran fuera del sistema y de esa cifra el 60% representa a mujeres y diversidades.
En relación con el vínculo entre las agendas políticas y los movimientos de mujeres mencionó la importancia que tienen las cooperativas como organizaciones que garantizan la igualdad de sus miembros a través de la propiedad compartida. En este punto hizo un paralelo conceptual entre el cooperativismo y el feminismo: “ambos están atravesados por los conceptos de igualdad y justicia y tienen como objetivo limitar las relaciones de poder”.
En otro tramo de su intervención recordó que durante la campaña de 2019 se bregaba por una agenda de género que debía contemplar innumerables reclamos. Dentro de ellos y teniendo la dificultad de gobernar en el marco inédito de la pandemia dijo que “es un ejemplo la conquista de la ley de acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y el Plan de los 1000 días por el cuidado de la salud integral”.
Finalmente la concejala Carnevale afirmó que no sólo es necesario imaginar una sociedad más justa e igualitaria, sino construirla aquí y ahora, fortaleciendo ese movimiento social y con él a todo el campo popular. “La desigualdad nos priva del talento de las mujeres y de las diversidades” concluyó.